INGREDIENTES
1 berenjena grande
1 calabacín grande
1 o 2 tomates
Salsa de tomate casera
Queso rallado al gusto
Sal
Aceite de oliva
PREPARACIÓN
Lavamos bien las verduras pues, preferiblemente, las
cocinaremos con cáscara.
Laminamos la berenjena, la salamos y la dejamos reposar una
media hora para que sude y pierda el amargor. Retiramos con un papel de cocina
el líquido que ha soltado.
Laminamos también el calabacín y el tomate, procurando que
nos queden todas las rodajas de tamaño similar. Salamos las verduras.
Ponemos a calentar la plancha con una pizca de aceite y
cocinamos en ella las verduras. Yo el tomate no lo paso por la plancha, me
gusta cómo queda con el toque de horno final, pero va en gustos.
Preparamos una fuente apta para horno. Cubrimos el fondo con
salsa de tomate y colocamos las verduras en la forma espiral característica de
la ratatouille. Repartimos queso rallado por encima y metemos al horno,
gratinado y calor, hasta que el queso quede al gusto (yo lo dejo poco más que
fundido, pero se puede dejar hasta que quede gratinado).
Sacamos del horno y servimos enseguida la ratatouille. Una
ricura sin cesar
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